
Todavía no sé cuál es tu nombre.
Te siento tan mía, que llamarte de algún
modo sería como separarme de tí,
reconocer que eres distinta a la
substancia de que están hechas
las sílabas que conforman mi nombre.
En cambio, conozco demasiado bien el de ella
y hasta qué punto ese nombre se interpone entre nosotros,
como una muralla impalpable y elástica
que no se puede nunca atravesar.
Todo esto debe parecerte confuso.
Prefiero explicarte cómo te conocí,
cómo advertí tu presencia y por qué
pienso que tú y ella son y no son lo mismo.
Fragmento de Carta a dos desconocidas del libro Aguila o Sol de Octavio Paz.
modo sería como separarme de tí,
reconocer que eres distinta a la
substancia de que están hechas
las sílabas que conforman mi nombre.
En cambio, conozco demasiado bien el de ella
y hasta qué punto ese nombre se interpone entre nosotros,
como una muralla impalpable y elástica
que no se puede nunca atravesar.
Todo esto debe parecerte confuso.
Prefiero explicarte cómo te conocí,
cómo advertí tu presencia y por qué
pienso que tú y ella son y no son lo mismo.
Fragmento de Carta a dos desconocidas del libro Aguila o Sol de Octavio Paz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario